El movimiento artístico Expresionismo abarca el periodo que va desde principios del siglo XX hasta aproximadamente 1930. Con su aumento de la expresividad, este estilo circunscribe la actitud ante la vida de una generación joven de la época. Con todos los medios a su alcance, los jóvenes artistas pretendían aumentar su expresión personal. No sólo las artes visuales, sino también la música, la literatura, las artes escénicas y la arquitectura se vieron afectadas por esta corriente expresiva. En el arte moderno, el expresionismo alemán ocupa un lugar destacado junto al fauvismo francés o el estilo de arte cubista.

Artistas destacados como Paul Klee ("El gato y el pájaro"), Ludwig Kirchner ("El jinete de circo") o Emil Nolde ("Bailarinas de velas") dejaron su huella en el expresionismo en la pintura. Con una acertada reducción de los motivos, estos pintores llevaron al lienzo sus emociones subjetivas. Con su lenguaje formal idiosincrático y con colores fuertes y sin mezcla, diseccionaron los motivos y crearon obras expresivas. Los jóvenes artistas entendían esta libertad creativa como una resistencia contra los agravios sociales de la época.

Durante este periodo surgieron famosos grupos de artistas. La asociación de Dresde "Die Brücke", con artistas como Karl Schmidt-Rotluff, Max Ernst y Paula Modersohn-Becker, o el grupo de Múnich "Blauer Reiter", que incluye a los pintores Franz Marc ("Die großen blauen Pferde"), August Macke ("Tunisreise"), Gabriele Münter y Wassily Kandinsky ("Gelb-Rot-Blau"), son mundialmente conocidos.